[De Fondo: Dirty Little Things – Bang Bang, You’re Dead]
Yo no olvido al año viejo… aunque hay veces que me gustaría.
Como les decía en la tercera parte del conteo, nos gusta recordar qué pasó en el año que dice adiós.
Así recuerdo que al comenzar el año, estaba más flaco y pesaba 75 kilos. Desde ahí dejé la dieta para, después de cómo seis meses, comenzar a hacer panza. Dicen que Hay cosas que no duran para siempre. Fui el graduado desconocido y por fin saldé la deuda de honor que tenía con mis padres al pasar mi examen extraordinario. También canté rolas de mi carnal José Alfredo…
En febrero se murió el papá de mi mejor amigo y el concierto de los Stones. Mientras que en marzo ese inolvidable viaje a Otumba donde había una belleza de vieja a quién me late leer. En abril me metí al festival de la palabra y en Mayo compré mis tix para el Vive Latino. En junio me compré mi iPod y se jodió mi compu . En julio la conocí…
En agosto entré al psogrado y fue la reunión blogger de Coyo. En septiembre el cumpleaños de la Soul y 26 horas despierto. Mientras que en octubre encontré trabajo… y a ella la perdí.
Noviembre fue un mes muy difícil de adaptación a todo…
Y pues este diciembre ha sido de sinsabores, de dejar atrás muchas cosas y de hacer reflexiones, sobretodo por la actitud que estoy tomando ante la vida. Quizá por eso me anima el año nuevo, porque es una oportunidad de volver a empezar en muchas cosas, de planear y revalorar muchas cosas que están a mi alrededor.
También de salir de la cama silencioso, tomar mis cosas y cerrar la puerta…
Haciendo un balance no fue tan mierda este 2006 como creía, conocí mucha gente, hice muchas cosas, se me cumplieron otras más. A veces creo que juzgo mal en año por cómo lo cerré y estas letras corroboran que no todo fue tan malo.
Contemos juntos para el fin del año, van 2…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario