miércoles, diciembre 31, 2008

EL ÚLTIMO POST DEL 2008

Ha sido padre leer los recuentos y los propósitos de algunas personas a las que sigo en mis feeds, tanto que no sé si hacer un recuento, o empezar a divagar con las cosas que me gustaría tener en 2009. Este año fue uno en donde te me pasó casi todo, victorias y derrotas, nostalgia y visión, salud y enfermedad, grandes lecturas y poca escritura (creo que oficialmente es el peor año en cuanto a producción de post), encuentros y desencuentros, amigos y enemigos, risas y mucha fiesta.

Mis propósitos para el año que se asoma por la ventana quiero que sean muy sinceros, pero también prácticos y factibles. Los economistas no ven con buenos ojos a los próximos 12 meses y quizá eso limite nuestros deseos o los haga más difíciles de conseguir. Voy a intentarlo a ver qué sale:

1. Conseguir trabajo/tener dinero.
2. Escribir más y mejor (sí controlzape, ya te leí, tienes toda la razón). Terminar lo que ando escribiendo.
3. Las clásicas: bajar de peso, hacer ejercicio, ser un buen hijo/amigo/ciudadano.
4. Comprarme un Nokia N95, o un iPhone, o de perdis un iPod Touch para estar conectado desde la calle (maldito vicio).
5. Conseguirme una novia.
6. Mejorar mi trabajo en edición de podcast y sacar más (uno de cómics, otro a ver de qué).
7. Ahora SÍ ir a los conciertos que quiero y no quedarme con las ganas.
8. Ir a la FIL de Guadalajara. Conocer a la Teacher y a mi amiga Blanche y ver a los cuates.
9. En 2010 tener mi tarjeta oro de cinemex. Es decir, ir más al cine y salir en bola con los cuates para ver chidas pelis.
10. Obtener la beca de la FLM. Por lo que tendría que escribir un nuevo proyecto.
11. No desvelarme…tanto.
12. Ahorrar para ir a Berlin, de preferencia en tiempos del Oktoberfest.

Me gustaría dar mis agradecimientos a toda esa gente linda que me ayudó en el año, pero son tantos que temo pasar a alguno por alto. De todos modos en la mayoría de las felicitaciones a mí no me mencionan. Lo importante es que no necesito decir quienes son mis amigos y quienes están en mi pensamiento, están en las llamadas telefónicas (ya tengo nuevo cel), en el Messenger, en el twitter, en las fiestas, en los podcast y sobre todo en mi corazón.

De todo corazón les deseo que el año que viene podamos ser capaces de sobreponernos ante lo adverso, que disfrutemos lo más que podamos de nuestros seres queridos, que haya mucha música de fondo, mucho baile y risas y sexo y alcohol y que todo eso valga la pena. En fin, nos vemos el año que viene, despidamos el último post del 2008 con un brindis: SARAVAH!

¡¡¡¡FELIZ AÑO 2009!!!!

lunes, diciembre 29, 2008

REMINISCENCIAS DEL PASADO

Se dice bien que la única constante es el cambio. Ya nada es como hace tres años, mucho menos como hace cinco que empecé este blog.

Gané y perdí cuates, tuve una chamba y ahora ando desempleado, tenía un podcast y ahora tengo otro, juré amor y ahora ando sin “musa inspiradora”. Mis vicios no son los mismos… Vamos, ni el jodido template de este blog es el mismo, ha tenido sus variaciones durante todo este tiempo.

Añorar… podría vivir de eso, pero veo que es poco práctico. Eso sí, he luchado por no extrañar nada del pasado, aunque debo confesar que hay veces que no puedo. Que me recarga en la conciencia que muchos sueños, muchas palabras y mucho de lo que era ya no es. Esta situación es como un espíritu al que hay que exorcizar repetidas veces.

Ni aun todos los lugares comunes son iguales cuando los visito…

Ya no quiero glorificar el pasado, no quiero ver un futuro incierto que después glorificaré porque no es tan bueno como lo que vivo. Quisiera ir como en un punto y aparte, con relación aparente mas no determinante de lo uno y lo otro, quiero que no me pesen los años porque todavía no es momento de que no sean liviano. No quiero ver cómo lo que hoy cambió desvanece lo que quiero, lo hace un espejismo que al contacto con mis manos se pierde en el aire. Al menos me gustaría que eso no me importara.

No quisiera llenar de quejas este blog (por ahí dejan de seguirme o hablan a mis espaldas) y al final la queja es el punto de retorno. Es mi blog y los demás tienen opciones como yo las mías. Si somos inteligentes sabremos cuáles son las opciones, ya no seré yo el tonto que las escriba. Al menos en eso puedo lograr mi ruptura con el pasado.

El pasado nos determina, no podemos negarlo porque todos esos eventos nos definen cómo somos, el resultado de todos ellos está en nuestro reflejo, lo que sabemos, lo que decidimos, nuestros temores, todo es el resultado de lo que fuimos. Se acerca un nuevo año y antes pensaba que ocasiones como ésta eran una buena oportunidad para tener un nuevo comienzo, empezar de cero pero… ¿realmente se puede comenzar de cero, ignorando todo eso que te hizo como eres?

No lo sé.

Empecé con un “nada es lo mismo” y termino con un “lo que fue nos hace lo que es hoy”. Si lo que fue ya no es ¿Cómo esto nos sigue determinando hoy? Quizá porque “eso que fue” no lo dejamos atrás o porque el pasado es más raíz que abono. Ahora pienso que una mariposa es porque alguna vez fue un gusano, pero tras la metamorfosis es un ser diferente. Pasado que determina y presente nuevo al mismo tiempo. Me gusta hacerme bolas.

En fin. El miércoles post de año nuevo, propósitos y esas cosas.

Nos vemos en el futuro.

sábado, diciembre 27, 2008

RUDO Y CURSI

Los que me conocen saben que soy un cursi

Según la página de la película Rudo y Cursi son un 33% rudo y un 67% cursi. Dejé de hacer poesía por lo mismo (y porque le tengo cierto rencor mal plan), me sale demasiado melosa y tierna, casi increíble para los estándares actuales. Mi suéter favorito es uno que se parece a los de César Costa (tierno, tierno ♫) y sí soy susceptible a ciertas cosas (rolas, pelis, etc) que entrarían en la categoría.

Ayer fui a ver la ópera prima de Carlos Cuarón, a quien tengo en buen concepto gracias al guión de Sólo con tu pareja (mi peli favorita del cine mexicano contemporáneo) y por aquella frase que dio un día en entrevista: “yo tenía a mi novia literatura, éramos de manita sudada; hasta que un día mi hermano me presentó al cine, y me dio tan buenas mamadas que al final me quedé con ella”.

Yo presuponía una jalada de los pelos, otros me decían que era un “y tu mamá también futbolero” (como @el_espuki) y… para mí no fue nada de eso. Es una historia que entra en lo más profundo de nosotros mismos y nos muestra en una analogía cinematográfica nuestras dolencias más reales: la pérdida de piso, la corrupción y abuso de derechos humanos, la difícil decisión de conocer si debemos hacer lo que realmente nos gusta o para lo que somos realmente buenos, la pasión religiosa del fútbol, todo el rumor que hay detrás de él y la lenta (pero segura) conquista del país por parte del crimen organizado.

Es la historia de dos hermanos, con sus rivalidades que son puestas al límite cuando se encuentran ante la oportunidad de su vida. Gael y Diego, como Caín y Abel pamboleros nos demuestran qué fácil podemos caer ante los bemoles del poder. Lo que fácil se da y fácil se puede quitar. La premisa y slogan de la peli es: la vida es un volado… y así es, no sólo bastan nuestras decisiones, sino una pizca de eso que me gusta llamar destino.

Carlitos no me falló, es una película que puedo recomendar (y como habrán visto en otros blogs, no estoy nada equivocado) para ver más de una vez, para cagarte de la risa de cómo habla Diego (como ponchito, me cae) y cómo canta Gael (la neta me retecagué con esa parte), la sabiduría terrenal y narración de “Batuta” y las piernas de esa cubanita que le hace los favores al Cursi.

Sí, sigo pensando que soy cursi, que soy un poco como ese personaje, que a menos de que tenga un buen varote (o de menos baje de peso) no tendré su suerte, quizá también confunda lo que me gusta con lo que sé hacer mejor. Tal vez sólo me gustó la forma de escribir y dirigir de Cuarón y sólo es un momento de euforia, a lo mejor la vuelvo ir al cine a verla.

Por cierto, sólo tengo 7 visitas este año al cine, así que prácticamente me puedo ir despidiendo de mi tarjeta oro de Cinemex. =(

Nos vemos en el futuro.

****************

PS. @Portero, a mí lo pendejo o lo cursi se me quita. A ti lo PUTO (ni la cara das para insultar, te creí más hombrecito) ni aunque te hayas casado. =)

miércoles, diciembre 24, 2008

DE NAVIDAD Y OTRAS COSTUMBRES

Ya no lloriquearé porque las navidades no son como las de antes, cuando era niño y todo parecía un lugar mágico y lleno de significados. No, estos tiempos no se merecen este tipo de descripciones tan cursis que ya pasaron de moda.

Tampoco se me cumplió lo de una orgifiesta este día pero…

En fin, la comida de estas fechas bien vale la pena para comerlas en esta noche. Tomar un poco de ponche y picarse una muela con la caña de azúcar. Tomar refresco frío y cantidades industriales de alcohol (en mi caso sólo rompope y si acaso sidra y vino espumoso, mi familia es abstemia), pozole, romeritos con su respectivas tortitas de camarón, el bacalao que aprendí a amar (antes lo despreciaba, pero lo hacen muy rico) y ver a parientes que en contadas ocasiones ves porque viven muy lejos o como yo, no soy muy afecto a quererlos ver seguido.

No quiero imaginarme el tráfico que hará al rato, no por los congestionamientos habituales de estas fechas, sino por la planeación de las obras viales rumbo al bicentenario. Cabrón, han jodido cada avenida que han podido, no hay vías alternas y todo está hasta la madre, porque el año y cachito hay celebración nacional grande y en dos más las presidenciables (ya les urge a los putos esos).

En fin, como es una época de paz en la tierra a los hombres de buena voluntad, y como de esos ya hay muy pocos; sólo nos resta disfrutar lo que podamos y para qué hacerlo pensando en el pasado, inclusive en el horrible futuro que nos espera. Más allá de ondas comerciales, religiosas y de otras costumbres familiares, la navidad se trata de una oportunidad nueva, un punto y aparte que surge donde menos lo esperamos, como por ejemplo, un Dios nacido en el pesebre más pobre de Belén, Galilea.

También es época de pedir y de dar ridículos en nombre de las fechas. Mucho gorro, mucho regalo, mucha deuda y al final no importa, ya habrá tiempo de pagarlas todas, de arrepentirnos por todo lo que hagamos y gastemos. Al menos hoy comeré de todo, tomaré lo que pueda y al final daré la feliz navidad a quien se deje.

Para concluir, como cada año, me gusta ver Love Actually antes de salir de casa a la cena de Navidad. Les dejo un clip que salió de esta película, en donde uno de los personajes es un roquero retirado que regresa para lanzar una rola en las fechas, interpretado por Billy Nighy. Muy gracioso. No dejen de verlo, es una combinación entre Mick Jagger y Robert Palmer, pero con atuendos decembrinos.



¡¡¡¡FELIZ NAVIDAD!!!!

martes, diciembre 23, 2008

QUÉ HORAS SON?

[De Fondo: Chicago - Does anybody really know what time it is?]

A veces creo que el tiempo es como un caballo, y que los relojes son riendas para controlarlo.

El viernes perdí mi celular. Además de haber perdido todos los números de mis contactos (si por ahí después los molesto en el Messenger o por mail, disculpen las molestias) desapareció la última rienda que me quedaba para contabilizar el tiempo, para saber a qué horas son, para medir mis tiempos, para corroborar las asistencias puntuales a cualquier lado, para darle cause a una obsesión por ganarle al tiempo.

Mis relojes se han quedado sin pilas y no pienso por ningún motivo ir con el relojero habitual porque la pila se acaba en cuatro meses. De repente salgo a la calle y me siento descalzo, con una interrogante que me hace sentir incómodo, una falta de peso que es una carga insostenible, un vacío que se te adhiere sin saber cómo quitártelo.

Mi cuarto, la sala y la computadora son los últimos relojes que me quedan. El reloj de pared me mi cuarto, tan viejo y tan sobreviviente a las batallas que le hace falta el segundero, es una pieza inmóvil que hace notar su movimiento sólo cuando no lo ves. El otro, el de la sala, más reciente y acorde a los tiempos, tiene un segundero que no se detiene cada segundo, que barre la circunferencia una y otra vez cada minuto, es elegante y confiable. Ojalá me lo pudiera llevar a todos lados. El de la computadora, que saluda a un lado del icono del Messenger, es el que noto cada vez que me pierdo en la incertidumbre del tiempo frente al monitor y el que me avisa que ya es hora de apagarlo.

Me acostumbré a cargar las medidas del tiempo, que me felicita cuando llego temprano, me insiste que es hora de levantarme y me despide a la hora de dormir. Me da la seguridad cada que veía mi muñeca o el frente de un teléfono, me devolvía con el tiempo al espacio donde mis pies se establecen. Ahora veo mi muñeca y está desnuda, no hay objeto que machuque mis vellos, que esté simétrico con mi lunar o que combine con mi ropa. Me acostumbré a no hacer la pregunta.

Por el momento, tendré que salir a la calle y preguntarle a aquel que posea un reloj:



Habrá post en nochebuena? Igual y sí. Ahora son las 4 am, momento de dormir. =)

Nos vemos en el futuro.

martes, diciembre 16, 2008

PARABÚS PODCAST #0

Pues sí, volví a esto de los podcast. Qué puedo decir, extrañaba hacer un proyecto, algo diferente, esa química que existía cuando Minerva y yo hacíamos la hora del café. Debo reconocer que en un principio no sentí el vacío dejado por mi podcast; pero la imposibilidad de hacerlo por mi indecisión o por el nuevo trabajo de Mine hicieron lejano que pudiéramos reactivarlo.

Un poco antes conocí a Bumen, quien había escuchado la hora del café y me ofreció un espacio para alojarlo, después me dio la oportunidad de incorporarme a Correspondencias. Disfruté mucho el ayudar a más gente. Aunque me decían productor, debo reconocer que no me sentía así, al contrario, este reto que se me presentaba me emocionaba bastante y me sentía más un brazo que una cabeza. Era un podcast temático y había que ayudar a que diera un paso adelante dentro del ámbito amateur, esa era mi tirada.

Aunque yo era feliz editando y colaborando en el podcast de literatura, sentía que algo me faltaba, ese espíritu de propiedad como lo tenía en mis grabaciones, la libertad que te da el no estar limitado por tópicos y abarcar temas diversos. Por su parte Bumen había adquirido experiencia en los micrófonos y la confianza para abrirse a otras posibilidades. Un día creímos que sería bueno hacer un podcast diferente. En ese momento no hubo algo en concreto y la idea se quedó en el aire.

Hace un mes o dos, mientras caminábamos por 5 de Mayo a ella se le ocurrió la idea de Parabús: un podcast que fuera de recomendaciones y de debate sobre la ciudad. A veces me niego a creer en señales, pero hubo una tan contundente que supimos que debíamos hacerlo: afuera de Bellas Artes unos tipos fuereños nos preguntaron de un buen lugar para comer en el centro. En Palma se me ocurrió el nombre del podcast y días después ya estábamos discutiendo cómo sería.

Grabamos a distancia, así como incontables ocasiones grabé con Mine. Fue padre grabar y escuchar que casi no se nota que a nuestra voz la separan kilómetros. Otra vez, poner cortes de secciones, una entrada más a mi gusto, música para amenizar, disimular las frases inútiles. Era como volver a una magia pedida, que en su regreso era una diferente, no por eso poco interesante, era un producto de la necesidad y del entusiasmo. Así había nacido este número 0 del Parabús.

Habrá próximamente página web y esta semana saldrá el 0 y el 1 para en enero hacerlo dos veces por semana. Los martes con un tema de debate sobre la ciudad; el jueves de recomendaciones y la cartelera. Es un reto muy grande, sobre todo un compromiso bastante demandante, pero estamos dispuestos a intentarlo y a terminar una temporada, si todo sale bien.

En fin, te invito a que lo escuches el #0: para descargarlo, sólo haz click aquí.

Nos vemos en el futuro.

domingo, diciembre 14, 2008

Y VOY (DIGO, Y FUI...)

Así como dice la canción:

Caminos de Michoacán
y pueblos que voy pasando,
si saben en dónde está,
¿Por qué me la están negando?
díganle que ando en Sahuayo
Y voy pa' Ciudad Hidalgo

Tengo familia en Ciudad Hidalgo, Michoacán. Los periodos en los que los llego a ver son largos, como cada año o cada dos, mis parientes van a verlos más y están en contacto con ellos y mi familia muy poco. Yo en lo particular casi no me gusta juntarme con la familia de mi mamá (cuya familia es de ese pueblo purépecha) porque no me siento a gusto. Así que casi nunca me aparezco en sus reuniones, ellos saben que en una celebración importante podría no estar.

Ayer me levanté temprano, preparé todo para salir con rumbo a la boda de uno de mis primos michoacanos.

Tras cuatro horas en carro llegamos a Ciudad Hidalgo, pueblo natal del abuelito de mi mamá y de la esposa e hijos de un tío que ahora vive con otra familia en Estados Unidos. Aarón, de 22 se comprometía con Miriam, una mujer con la que ya llevaba rato andando (me informaron, como casi no veo a la familia) y quería unir sus vidas.

–Ya se viene la temporada de los casamientos –decía mi tía Irma, mama del novio, dirigiendo su mirada hacia mí. Mi mamá le contestó que ahorita no creía, que no me veía de dónde, porque no andaba con alguien. Yo solo saqué de la manga una sonrisa y mi pose reflexiva. Realmente me puse a pensar en cómo sería mi boda, cómo la deseo tanto y en que sí, mi mamá tenía razón después de todo.

Todos mis tíos se sorprendieron que yo fuera y decían “pensamos que no ibas a venir, ya ves que siempre andas desaparecido”. Sí, yo era el aparecido, después de meses de no verlos ni saber de ellos. Quizá estoy mal en no tener tanto contacto con mis parientes, digo, a veces no los aguanto pero esa vez me la pase de lujo haciéndome el aparecido.

Durante la ceremonia, que fue civil, mientras tomaba fotos, no pude evitar que me embriagara la emoción, por lo que tuve que salirme un momento para calmarme, para respirar y retomar el mood de alegría por el momento de mi primo. Al abrazarlo, no pude evitar decirle “Bienvenido al primer día del resto de tu vida. Felicidades”.

Una de las tías me invita a que saque a bailar a una niña, de las muchas guapas que hay en la fiesta. Como saben, no sé bailar pero le hago el intento. Ella se llama Erica y a los dos nos costaba trabajo mantener el ritmo. Nos llevábamos bien y quise conocer más. Le pregunté su edad y eso me noqueó: 13 años. –Juro que te ves de 20– le dije. Ella se atrevió a preguntarme lo mismo a mí y eso la noqueó a ella: 26. –Te ves más chico, yo sí creía que tenías 20.

Varias palomitas e intentos de bailar después (deben conocer a mis tías, no les importa que baile mal, sino que lo intente y me divierta con ellas), los amigos del novio lo intentaron encuerar y al llevarlo al baño, lo lograron. La música del grupo estaba pinche y uno de los cantantes desafinaba horrores, pero eso no impidió que alguien en la fiesta se divirtiera.

Hoy me levanté en uno de los hoteles del pueblo, con el olor a cigarro del cuarto de abajo. No podíamos quedarnos más porque las mujeres de mi vida (no se apunten por ahí), es decir, mi mamá y mi hermana tienen que trabajar. No pudimos irnos sin comer unas tradicionales carnitas, que sobra decir que estaban deliciosas y que cerraron con broche de oro un buen finde. Y pensar que la neta no quería ir…

Nos vemos en el futuro.

lunes, diciembre 08, 2008

EL JUEGO DE LA RAYUELA

1. Desde hace unos días tenía unos dolores abdominales muy fuertes. Una amiga doctora por el Messenger me dijo que era Amibiasis, después Gastritis; pero la doctora que me vio dijo que era Colitis. Me dijo que no tomara lácteos, lo que no me dijo fue que no debía comer cosas crudas, picantes, café y carnes rojas: el 80% de mi comida en la semana. Los dolores han sido molestos y a veces insoportables.

2. Mi amigo Leo me dijo, con una Modelo de lata en mano, que la crisis había afectado en su trabajo, que ahora el se hace cargo de su área cuando antes mínimo eran tres personas. La presión es mucha pero no puede renunciar ya que, como bien sabe (trabaja en una aseguradora) la situación empeorará y quizá en un año y medio se levante la economía.

3. Nos vemos en el futuro.

4. Y en mi cama te extraño. De pronto olvido que es invierno y tengo que sacar todo
¿Cómo será el invierno en Europa? Creo que no saldría de la cama, no se me olvidaría que
ese calor de adentro. Yo sé que tú me extrañas de la misma manera, aunque me digas que
adentro hace calor, extrañaría México de la misma manera que tú, amiga. Aunque
has encontrado olvido en tu trabajo, no te creo… y lo sabes.
sabes que estamos lejos, al olvido le costará trabajo encontrarnos. =)


5. [De Fondo: Miguel Ríos – Buscando la luz]

6. Me encanta que me digan pretencioso, porque realmente lo soy. Creo que poco a poco dejo de temerle a la crítica, que era una de las razones por las cuales no escribo mucho en Metatextos y por las que dejé de escribir mucho en Big Blogger. Pero bueno, en el blog de cuentos ignoro lo que me molesta y en el colectivo y aquí mismo practico mi deporte favorito: borrar comentarios indeseables.

7. Sé que estás sorprendido y te agradezco si llegaste a este párrafo. Es que mi amiga Bumen me prestó Rayuela de Julio Cortázar. Debo decir que más que el relato, me gustó la forma innovadora de crear un texto, el camino azaroso y lúdico de ir capítulo a capítulo, decodificando una realidad, de la forma en que a naturalmente hacemos para ordenar nuestros pensamientos. Este post es un juego, el juego de la rayuela, espero que te guste. Te recomiendo que termines de leer y después relee comenzando desde aquí, en el párrafo 7. El orden es así: 7-5-9-2-4-8-1-6-3; o como gustes. Quizá hasta haya un orden mejor por descubrir…

8. Fragmentos de esta nota de El Universal: “Carlos Hermosillo, aseveró que Cruz Azul logrará romper la larga sequía…Lo único que me viene a la memoria de ese partido es, primero: el golpe que recibí y después: el haber tirado y anotado el penalti con el que Cruz Azul salió campeón”.

9. El brindis para iniciar el juego se dio entre una multitud que jamás se daría cuenta. Así nacieron dos escritores famosos, que serían conocidos por sus excentricidades, por las amistades con intelectuales y políticos, por la arriesgada crítica a sus compañeros de generación y por la continua reflexión de la literatura contemporánea. El desafío que representa el juego era tal que a los dos los emocionó tanto inaugurarlo esa noche.

martes, diciembre 02, 2008

LA MÚSICA QUE ME SIGUE

Amo la música, la bien tocada, la que me impresiona por sus acordes o por sus letras, la que me recuerda un momento de mi vida. Amo las sensaciones que me provoca, ese sentimiento de ser parte de algo (conocido o desconocido) por algunos minutos, una droga para los oídos, un estímulo para la sangre, canciones que por alguna razón me hacen sentir bien.

De repente llegan rolas que se pegan a mí, se proyectan y me siguen como una sombra. No me dejan hasta que haya consumido todo lo que pretenden darme, o en el momento en el que llega otra a ocupar su lugar. Las escucho repetidamente, las silbo, las canto tantas veces como sea necesario, como tomar caramelos de una bolsa hasta que te los acabas por la gula. Se me pega una canción y esa fue mi forma para quitármela, disfrutándola en el proceso.

A veces, como saben los que tienen un rato conmigo en el blog, que me pasa como a Tarantino, que escucha una canción e imagina una escena de una historia por contar. De la manera en que uno encuentra 10 centavos que completan un peso, esta rola llegó a mi vida. Ya ven que ya quiero escribir otra historia para volver a pedir una beca, una melodía también fue un detonante, pero me faltaba algo que completara el círculo y así buscando entre canciones de Álvaro Carrillo, me encontré una de Roberto Cantoral llamada “Noche no te vayas”. Como la mayoría de los boleros, una rola deliciosa:



Miguel Ríos fue la primera persona que yo escuché cantar rock en nuestro idioma, antes de Caifanes, de Soda y muchos otros. Recuerdo que mi papá compró un cassette, esa música me fascinó, no había nada parecido en la radio, letras que de niño creía distintas y que de grande observé que tenían la carga emocional y hasta filosófica del roquero de los 60’s. Al principio no conocía mucho y hoy no todo lo de Ríos me fascina, a veces siento que le falta un buen letrista; pero la forma de cantar, un mix entre el Soul y Cervantes; una facha de un posible Elvis si hubiera vivido en los 80’s que lo distinguían y lo colocaban en mis gustos más exquisitos.

Viendo su concierto Rock & Ríos del 82 (el año que nací, fíjense) en una parte canta "Buscando la luz", que en su versión original es fantástica; una mezcla de filosofía zen, mantrams recitados (como en ciertas rolas Beatleras).Me sorprendió que viniera en una recopilación de Miguel llamada “Canciones de amor para tiempos difíciles”. Gran título. No puedo dejar de cantarla, como todas las rolas que aparecen en este video del concierto que mencioné:



Y pues ya, esta semana me detectaron colitis (por estrés, me dijo una guapa doctora) y aparte me dieron medicamento para desparasitarme. No he encontrado una mejor forma de sobrellevar los días que escuchando música y cantándola. Aparte sigo leyendo. Ya terminé Rayuela de Julio Cortázar y ahora retomaré “La región más transparente” de Carlos Fuentes, un libro no me va a vencer.

Nos vemos en el futuro.