viernes, julio 30, 2010

SUENA MEJOR...

[De Fondo: Stardust - Music Sounds Better With You]

Escribí un post largo pero aún no está listo para salir, así que ahora va un cortito para no perder la costumbre. Me encuentro bien, si lana pero chido. Recuerden que a su servidor casi no le gusta la lluvia (irónico). Hay nuevos proyectos en mi vida de los cuales ya se enterarán (o igual ya lo hicieron).

Hace unos días leí el cómic final de Scott Pilgrim, una miniserie muy padre (cuya película vienen pronto) y que en uno de sus capítulos tiene como título “Music Sounds Better With You”, rola de Stardust con las vocales de Benjamin Diamond y un ritmo para incendiar la madrugada. El video es dirigido por Michael Gondry (Eternal Sunshine…, The Science of Silence), un bonus sin duda.

¿Han conocido a alguien con quien se escuchen y se disfruten mejor las canciones? Yo sí y la extraño. Quizá (en un pensamiento altamente utópico y debrayado) y sea como dice la canción: love might bring us both together, I feel so good ♫



En fin, soñar no cuesta nada. Es lo que haré en estos momentos. =)

Nos vemos en el futuro.

lunes, julio 26, 2010

SOY UN ROMÁNTICO

[De Fondo: Tammi Terrell – All I Do Is Think About You]

No sé cuándo comenzó, es decir, exactamente de dónde me vino el gusto por la música romántica. Puedo suponerlo evocando algunos recuerdos: escuchar a mi mamá cantando Pandora, los días de visita a casa de mis tías (hermanas de mi papá) y chutarme cintas de Roberto Carlos y Camilo Sesto. O escuchar Estéreo Joya en casa de mi tía Sara (hermana de mi mamá) donde había toda clase de canciones cursis en español sobre cosas que no comprendía del todo en ese entonces, como la pareja o el sentimiento cumbre: el amor.

Soy fanático de las canciones románticas, de las bien hechas (no de esas que ahora componen tipos que al cantar se vienen en los pantalones). Tengo mi colección de música llena de ellas. Tengo de todo tipo, en inglés o en español. Me encanta escucharlas mucho y cantarlas hasta el cansancio. Siento como si una parte de mí se liberara, aquel sentimiento que no tiene destinataria, o tal vez sí, pero de manera muy platónica.

Una vez vi una película que se llama El amor tiene dos caras/The Mirror Has Two Faces (de mis pelis favoritas, GRAN comedia romántica). En ella, Barbra Streisand se avienta un monólogo genial (me hubiera encantado encontrarlo en youtube pero que no fue posible) que en resumen habla sobre cada que vemos una película, leemos un libro, escuchamos una canción romántica, un poco de ese amor vive en nosotros y que naturalmente lo aceptamos porque mientras dura se siente jodidamente bien.

¿Qué puedo decir? Yo también lo creo, firmemente.

Es curioso que, mientras escribía estas palabras, leyera a gente que ya no cree en el amor. Es cierto, hay que estar bien pinche loco para pensar que en un mundo tan egoísta y devaluado como el nuestro, con valores perdidos y tergiversados todavía existan personas que sientan (ojo, no dije “pensar”) que amar es más que coger consecutivamente. Tampoco es ilusionarse de la nada. Es entregarse, confiar, cederse, compartir y más que nada, conocer ¿Cómo puedes amar algo que no conoces? Sí, hay que estar locos ante el riesgo de ser herido al bajar los escudos, de enfrentar el miedo que significa el revelar la desnudez del alma. Y así nos perdemos de la experiencia.

Les soy sincero: el amor a mí me ha chingado. Amé a mujeres porque conocí mucho de ellas, las amé por lo que eran (lo que les gustaba, sus manías, su historia, su forma de sentir, sus sentimientos, cómo me hacían sentir y más) y las cosas no resultaron. Es difícil haber compartido tanto y que ahora ya no estén en mi vida. Me consuela saber que, ya casadas o con pareja, son felices y encontraron el amor en buenos hombres que están para ellas. La onda es que no me arrepiento de nada. Quiero volver a amar. Estoy bien pinche loco por hacerlo.

Y a pesar de todo, ahí están esas canciones de amor que no cambiarán de letra y que nos cuentan que la vida puede ser de otra manera. Son inmortales. Son cuentos sonoros que en varios minutos te conectan con el infinito. Son un artificio que nace del deseo profundo y real del ser humano, algunas veces de experiencias propias. Están ahí para que las hagamos nuestras, para acercarnos a ese sentimiento que por temor se nos ha convertido en inaccesible.

Últimamente me ha dado por acercarme a las baladas románticas. Colecciono las que vienen a mi memoria pero ésta llegó de forma inesperada. A alguien de twitter se le ocurrió recomendármela porque mencioné en un update a Marvin Gaye. Se trataba de una canción de su compañera de duetos Tammi Terrell. All I Do (Is Think About You) fue una canción compuesta en los 60’s por Clarence Paul, Morris Broadnax y Stevie Wonder, éste último grabó la canción en 1980 para su álbum Hotter Than July. Sin embargo, durante casi 40 años estuvo guardada la interpretación original de Terrell.

Es una pieza hermosa de letras llenas de pasión, una caricia al oído y un alimento a las fantasías. Me hace pensar en el amor y sí, también en una persona que me gusta. Soy un romántico incorregible y me vale si al mundo entero le molesta eso. =)



♪I hope and pray each day I live
A little more love I'll have to give
A little more love that's devoted and true
'Cause all I do is think about you ♫

Nos vemos en el (amoroso) futuro.

domingo, julio 25, 2010

SÁBADO, 9:00 A.M

Eran las nueve de la mañana y caminaba sobre Rio Tiber. El ángel de la independencia estaba enfrente de mí, dándole color a un día nublado y gris. Una capa de smog del tamaño de una cuadra hace que me tape la nariz. Necesitaba cambiar un billete y me compré un atole de arroz. Dí la vuelta hacia el norte por Paseo de la Reforma y pensé: ¡Qué buena peda!

lunes, julio 19, 2010

QUIZA UN INICIO

Seguido me pasa, leo lo que llevo escrito y termino borrándolo.

¿Se puede empezar de nuevo en la vida? No lo sé. Quisiera pensar que cada día es nuevo. El pasado se puede dejar atrás el día que uno quiera y puede pasar como los últimos dos párrafos: los leo, valoro, los selecciono y aprieto el botón “Supr” para que desparezcan. Me olvido de la función “Deshacer” y comienzo de nuevo.

Uno de los pensamientos más peligrosos es el que las cosas empiezan a carecer de sentido. Hace unos días tuve un sueño genial. Vamos, hasta estaba musicalizado por Strawberry Fields Forever de los Beatles. Desperté y vi la vida como si le hubieran puesto una capa gris, como si en mi subconsciente estuviera en HD y la vida tuviera la definición de un Betamax. Cómo me quedé con ganas de volver a ese sueño, o al menos que, por momentos la vida fuera un mejor lugar, uno más placentero.

Vuelvo a borrar otro párrafo, no sé hacia dónde voy. Sigo escribiendo sobre la nada. Tengo la tentación de volver a empezar. Creo que terminaré siendo como los tipos que escriben post de menos de tres párrafos, porque de seguro se les acabó la imaginación, les dio hueva o hacen escritos más completos que seccionan en partes. No lo sé.

Muchas veces ha pasado por mi mente la idea de borrar el blog (como borré las entradas en big blogger). Sería un buen punto para empezar desde cero. Borrar casi seis años de mi vida aquí. Extraño esas entradas que borré pero allá no las querían. Aquí es mi lugar, sólo que a veces me gustaría llegar más lejos con este blog, lo que implica escribir más seguido. También es un buen momento para empezar a realizar entradas de forma regular, volver a lo de antes, mejorarlo.

Hoy lunes tendré la chance de ir por el nevado de Toluca a un evento que organiza la compañía que hizo el tlalocphone. Promete ser interesante. Últimamente me han pasado cosas de ese tipo: premieres de películas, presentaciones de teléfonos, eventos, comida y bebida, regalos... sería mejor si trabajara en algo al respecto, como lo hacía antes de febrero. Desde aquel día del helicóptero, como si fuera el inicio de algo que no sé dónde me llevará. Aún no sé dónde me llevará esto. Al menos a una chamba que me permita resolver cosas urgentes, que me permita crecer e ir pensar hacia el futuro, algo mejor que donde estoy ahorita.

¿Se puede empezar de nuevo en la vida? Quizá todos los días, quizá nunca. Al menos hice seis párrafos. Entro a Blogger, copio todo lo que escribí para este día y lo pego en la plantilla, coloreo de rojo la firma final, pongo algunas etiquetas y publico, después aparece el link en Twitter, Facebook, Google Buzz y sus feeds. Lo que es el final de un proceso termina siendo un inicio.

Nos vemos en el futuro.

martes, julio 13, 2010

DE LA NADA

La vida es aburrida, salvo honrosas excepciones.

No tengo pretexto para no escribir en el blog. Justo había leído hace algunos días un post de uno de mis maestros en el cuál afirmaba que los mejores escritos que había leído trataban de todo y nada. Yo recordé inmediatamente De Perfil, de las primeras novelas de José Agustín, que encaja perfecto en la definición. Lo más entretenido, como llegar a un café y preguntar de lo primero que se te ocurra, de un tópico pasar a otro y deambular por el pensamiento a través de la charla, volviendo líquido el tiempo.

La vida va y me es muy cómoda. Me siento muy cómodo aunque mi balsa amueblada va rumbo a un precipicio. Tengo miedo de salir de la nave. A veces me siento como un león en cautiverio, domesticado y educado para recibir su comida sin cazarla, con el instinto enterrado por una buena vida. Adentro está mi lado salvaje, atrapado en mi corazón junto a una canción de Lou Reed, algunas novelas y un traje de cisne.

Llueve y hace calor. Algunas ideas se vacían en twitter y otras pasan por el subconsciente, a un ladito del olvido. No debo parar de escribir. No debo pensar. Pensar siempre me ha limitado. Yo soy de los que analiza mucho las cosas, determino los riesgos. Pero al final de tanto tenerlo en mente termino por no hacerlo. Corrijo los errores que me marca el procesador de texto, excepto twitter, que lo marcará dos veces. En la tele está Love Actually, en la escena cuando Colin Firth le pide matrimonio a la portuguesa. Suena God Only Knows de los Beach Boys. Demoledora, inmortal.

La peli inevitablemente me recuerda varias cosas. La primera es la promesa que hice en un aeropuerto en enero de este año. Está difícil, apenas tengo $300 pesos en una cartera y las cinco libras para mi boleto del metro. Todo me indica que debo ir allá, las señales no dejan de avisármelo, pero no hallo la forma de juntar para ir a la tierra de los anglos. También está mi futuro pendiente aquí, que no cambiará por un viaje (eso creo) y que tengo que atender. Quiero abogar a la fe que no tengo y a la esperanza que no habita en mí para creer que lo haré. No sé, quizá Dios quiera darme una sorpresa.

La segunda cosa que recuerdo es a la chica que me gusta, la de Venus… en mis sueños ya le ganó en número de apariciones a la gringuita. Sí, es raro.

Trato de prometerme a mí mismo que escribiré más seguido en el blog, no sé si lo logre, no sé si lo intente. Todavía hay gente que cree en mí (me dedicaron un cuento, me pidieron que escriba un post para un blog y una pequeña historia para otro) y anhelo que haya quien espere un post mío porque realmente lo disfruta, al menos salió uno de la nada. Es el año menos prolífico de mi vida así que lo que haga a partir de aquí ya es ganancia.

La vida es aburrida. Yo aún busco formas para hacerla un poco más entretenida. Si lo logro, serán los primeros en saberlo.

Nos vemos en el futuro.