1. Nací por ahí de la 1 de la tarde… con razón sé por qué soy tan huevón jaajaja.
2. ¡Qué difícil es recordar tus primeros años! ¿No creen? Creo que por eso a veces la memoria me falla, antes no había cosa que no recordara.
3. Caminar… siempre me ha gustado, creo que ir de un sillón a otro, o a los brazos de mis tíos, superando a la gravedad y retando al equilibrio mismo es uno de mis mejores recuerdos. Caminar siempre será de esas cosas infaltables en mi lista de “cosas-por-hacer”.
4. El kinder… recuerdo que era un niño obediente, bien portadito, bien vestidito, que no era desmadroso, que platicaba mucho, al que lo complacían en todo, que al principio le desesperaba ver tanta comida y que no acabara a la hora de la salida, no decía groserías, no pensaba en las niñas… ¡No sé qué chingados me pasó! :P
5. Bilingüe… ya me sabía del 1 al 10, los colores y una que otra palabra en inglés. Aparte ya sabía leer antes de entrar la primaria, así como sumar y restar… Era un niño prodigio, pero vi que eso sólo me alejaba de los que quería que fueran mis amigos, así que decidí que quería ser un niño normal, una batalla que aún no termino de ganar.
6. La primaria… era tan fácil, para mi todo era juego mientras que los otros niños les costaba mucho trabajo, otros se daban por vencidos. Mi primera paliza, mi primera maestra que me gustaba… aun así nunca fue tan complicado. Quizá por eso actualmente no me tomo muchas cosas en serio.
7. Mis juguetes… creo que fueron siempre la alternativa para muchas cosas a las cuales no tenía acceso, amaba la lucha libre pero no podía ir a las arenas, así que hacía mis funciones privadas con mis monos, aún no me compraban un Nintendo y yo ya había hecho mis versiones de mis juegos favoritos con luchadores y G.I. Joe’s. No tenía para máscaras y usaba un sweater para taparme la cara… En ese momento nació El Tlalocman.
8. Mi año favorito… ahí conocí muchas cosas, tomé a Dios más en serio, mi cumpleaños fue maravilloso, el Día de Reyes fue dadivoso y tuve mi primer walkman, ahí fue cuando me enamoré definitivamente de la música.
9. Me enfermé de hepatitis… antes de eso era un niño muy gordito, después de eso las cosas empezaron a cambiar. También vi Bajos Instintos, creo que ahí se sembró la semilla de mi fascinación por el erotismo.
10. El momento no fue perfecto, mientras a mis papás les iba económicamente bien a mis papás a mí la escuela dejó de hacérseme fácil, un año para olvidar… pero después de la tormenta viene la calma.
11. El año cuando salí de la primaria, y sobretodo, cuando conocí el mar… hay amores que no se olvidan y sigo viéndolo así, como la primera vez.
12. La secundaria fue un nuevo comienzo y empezaba a nacer el hombre… mi primera novia, mis primeros frees, mi negación al dibujo técnico… creo que aquí fui muy feliz.
13. Crisis… el país se fue para abajo y así todo lo que habían hecho mis papás, se vendieron muchas cosas y fue momento de reorganizar, desde ahí mi mamá cocinaba menos… cómo extraño su cocina.
14. La secundaria se volvió un infierno, como si todo el mundo se me hubiera volteado, necesitaba algo de aire y creo que al salir de ahí lo conseguí.
15. La preparatoria no fue tan fácil como secundaria, era adaptarme a una escuela de paga, a otras costumbres; sin embargo, en ese año descubrí mi pasión más reciente: El Internet, lo que revivió circunstancialmente al Tlalocman, esta vez para dejarlo definitivamente.
16. El Amor duele, ahí lo conocí y me vi nervioso, desesperado y prácticamente indefenso. También ahí supe que mi vocación era escribir, bien o mal pero era la manera de cubrir mis deficiencias en ese momento más grandes. Ahí también supe que la amistad es un salvavidas y que tus amigos no te dejarán caer.
17. Aquí empezó la resaca del amor y mi bienvenida al mundo de las depresiones… esta fue grave y sobretodo duradera. Súmale que te rechazan para la escuela en quieres estudiar, fu la primera vez que pensé que no servía para algo.
18. Segundo año de la depresión y primero de la Universidad, me alejé de las personas, me junté con las personas con quien nadie se junta. Todos los días era levantarse triste y empezó mi cita semestral a los extraordinarios… otro año difícil.
19. Tercer año de la depresión… el último Gracias a Dios, no saben de las cosas que me perdí por no superar un desamor. Desde ese momento me prometí no volver a ese tipo de vida y redescubrí la amistad y traté de aprovechar el tiempo perdido.
20. La mentira… ahí empezó, reprobé una materia que no tenía extraordinario y la vida fue más pesada. Pero por otro lado, como ya no me deprimiría, trataría de evadirme… buen pretexto para un viernes por la noche ;)
21. El año en que me organicé para el futuro y dio resultado: servicio social, tesis escuela, mentira, billar, chelas… sin embargo, como todo malabarista principiante, no todo salió como esperaba y no pude acabar con la mentira.
22. Acabé la escuela pero siguió la mentira, también los pretextos. Los ocupé para acabar cosas que se había quedado pendientes y pude, increíblemente conservar mi estilo de vida burgués. Pero la bola de nieve se seguí haciendo más grande. Fue el año en que conocí los blogs.
23. El año en que volví a la playa, trabajé en un periódico, tuve mi relación más intensa, volví a escribir poemas (no escribía después de la depre de tres años), conocí a muchos amigos y sobretodo, el año en que acabé con la mentira y que acabé como se debe la escuela. Yo pensaba que sería un año malo pero no fue así. Ahora veo en perspectiva mi vida y digo que al momento ha habido casi de todo… he sido muy afortunado.
Y… 24, ésto apenas está comenzando. :D
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