martes, junio 05, 2007

DESPUES DEL CONTEO...

[De Fondo: Los Búnkers – Canción de lejos]

Cómo me hizo bien despejarme de la computadora este finde…

Es agradable esa sensación de infinito cuando ves cosas más grandes que tú: así me sentí cuando estuve en lo más alto (reglamentariamente permisible) de la Torre Latinoamericana.

De repente me dieron ganas de escribir de mil cosas con ese paisaje urbano, era como si las palabras estuvieran en el aire y sólo bastara algo para atraparlas. Las fotos que tomé son geniales y espero publicarlas pronto.

Cómo me hacía falta dormir como Dios manda!

El domingo llegué agotado de esa bisteciza, me quité la ropa y me rendí a los brazos de morfeo. Decidí descansar, creo que ya la tenía atrasada desde el martes, no me repuso del todo la dormida en el ADO y el jueves y viernes de loco peligroso con las desveladas del Winnin Eleven: Pro Evolution Soccer (mi vicio nuevo).

Cómo me hacía falta terminar mis pendientes!

Ahorita acabo de terminar los dos artículos que tenía pendientes. La hueva que tenía no me dejó acabarlos bien desde el viernes y menos el fin de semana, así que apenas, martes, logré entregar mis dos artículos de lámparas en pantallas LCD y Cámaras Digitales… mañana esperaré las represalias. :P

Cómo me hacía falta desahogarme!

Ah señores! las presiones de la vida no tienen otra solución más cuerda que el desahogo, en cualquiera de sus presentaciones y ayer me desahogué cuanto pude, aullé como lo hacen los lobos a la luna, mi iPod me dio todo lo necesario para llegar a ese momento maravilloso y por un momento no hubo nadie con quien aparentar, sin familia, sin amigos, sin personas de fondo… sólo yo, y eso fue muy bueno.

Cómo me hacía falta saber quién fui!

Una vez hubo un muchachillo lleno de sueños, ilusiones, unas ganas tremendas de comerse al mundo, lleno de ideales y de metas, y sobretodo, lleno de amor. Hoy esa persona no existe más: el mundo o las circunstancias lo mataron de a poco, no supo manejar un entorno para él desconocido. A veces me siento como se sentía Louis cuando pierde lo último que le quedaba de humanidad en “Entrevista con el Vampiro”. Ya no siento ganas de ser quien fui, quizá algún día esté listo para volver…

Aún me quedan cosas adelante, mucho que pensar y valorar, hay cosas que no están tan definidas en mi vida y que ahora es un buen momento para tomarlas en cuenta. Mi tía me decía que ella consideraba IMPORTANTE cuando iba a clase y cuando trabajaba… eso todavía lo tengo en el pensamiento.

Nos vemos en el futuro.

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