[De Fondo: DJ Spiller – Groovejet]
¿Por qué hay cosas a las que deberíamos odiar o pasarlas desapercibido… y en cambio nos sentimos tan bien?
Ha terminado oficialmente el puente del 5, estoy hasta la madre de cansado, agotado, con los brazos adoloridos, con hambre, con flojera de contar lo que pasó (que bien amerita un post, espérenlo el miércoles), con muchas ganas de saber de lo que me he perdido en la blogósfera y esforzándome por escribir… lo que para mi sorpresa ahora se siente bien.
Terminar una serie de artículos y ocupar gran parte del tiempo a ver videos de youtube en el trabajo, mientras chacoteo con la banda en el Messenger es algo que se siente taaaaaan bien. =)
Extrañar a los amigos ausentes se ha convertido en algo que me de tristeza, pero ha dado la vuelta en algo tan bonito que hasta alguien tan sentimental como yo se siente bien. Sentir que no estás sólo, que hay alguien en lo oculto y a la luz, en el ruido y en el silencio, en lo cerca y a lo lejos, en el amor y en el desamor, en el encuentro y en el desencuentro que te leen y saben de tu vida, es algo que se siente bien.
Salirte de la rutina, para estresarte más de lo que te estresas en el trabajo, que te duelan las piernas, encontrar a gente desagradable y hallarles el gusto se siente bien. Recuerdo que quería hacer un post llamado “cuando los amigos de tus amigos no son tus amigos” pero creo que pude superar mi estado antisocial por un momento y sentirme bien.
La maldita música pop, que estos últimos años he llegado a odiar con odio jarocho, de tan sólo escucharla se ha sentido tan bien…
Perdono-olvido-dejoir es un proceso raro para mi bipolaridad; pero se está sintiendo muy bien…
Que el juguete del otro te guste, y que sólo te conformes con eso… se siente bien.
Y acordarme de “la niña del festival” antes de que se me acabara la pila de mi cel, desearle que tuviera un feliz puente, con el sólo hecho de que me parece muy linda y que no hay un sentimiento más allá del “me gustas mucho”… se sintió bien.
No sé, hay como que algo “Kitsch” en todo esto. Es un sentimiento raro, es como si este carácter bipolar que me cargo me haya dado un chance de andar de azotado y estresado, colgar un rato el traje y sentirme feliz, o cómo lo diría DJ Spiller con la voz de la mamacita Sophie Ellis Bextor: “If this ain’t love…why does it feel so good?”
Nos vemos en el futuro.
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