[De fondo: David Bowie – Fashion]
De verdad: este post iba a hablar sobre tirar la toalla y ante la escasez de resultados en los objetivos planteados, no hacer más que rendirse, dejarlo todo, renunciar, estar dispuesto a ceder ante la más cruda de las derrotas…
Pero hoy vi 300, película basada en un cómic hecho por Frank Miller, y recordé que no debo, que necesito seguir intentando, con todas las fuerzas que me caben, mis deseos más profundos.
En estos últimos días había decidido dejar todo lo que tuviera que ver con Internet y todo esto que se refiere a los blogs, me llegó el pensamiento de no ser una persona suficientemente capaz para escribir buenas cosas y se me hizo fácil pensar en un spot en el que podría dejar ver que me iba. Después pensé que si hacía eso no me gustaría el resultado, no por la gente que me pediría (yo sé que igual es poca) que no me vaya; sino porque si te vas es mejor no avisar, así es mejor, así no hay vuelta atrás.
Creo que soy una persona diferente a la que empezó este blog, de veras nunca quise, de manera consciente tener comentarios, ser famoso, hacerme una figura dentro de la blogósfera o cosas igual de estúpidas por las cuales mucha gente se esfuerza. Aunque no niego que en estos momentos estoy dentro de esa mecánica, por lo cual me sentía insatisfecho de no lograr lo que las figuras del blog logran post a post.
Hay otros fracasos, derrotas que duelen de a feo en el ego, cosas que suceden cada vez, películas que se repiten, pérdidas que no me dejan otro pensamiento más sentirme como niño castigado por la vida, que no puedo, que es mejor dedicarme a otra cosa, que esto no va a cambiar… mil pendejadas que uno piensa.
Pero la verdad es que así es la vida, un continuo caer y levantarse, cerrar y abrir, amar y odiar, querer y dejar de querer… y volver a caer, cerrar, amar y querer. Rendirse no es una prioridad ya que recordé qué es lo que mueve al mundo. Creo que la humanidad se ha sorprendido a sí misma con todo lo que ha logrado por tener pasión, por dedicación, inclusive por la terquedad, por no rendirse.
Yo no puedo ser ajeno a eso…
Lo intento de a poco, en el trabajo ya se está viendo el esfuerzo, ahora faltan todos esos pendientes, uno de ellos es lo que escribo en todos y cada uno de mis blogs, quizá no sea alguien popular, pero sí debo de esforzarme en cada cosa que sale de esa complicidad que tiene mi cerebro, vísceras, dedos y el sonoro teclado.
Ahorita estoy escuchando a Cansei de ser Sexy, me ayuda a no escuchar la basura que inunda mi Winamp desde hace dos días.
Nos vemos en el futuro (buen finde).
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