miércoles, diciembre 04, 2013

CARTA A SKENE 2013

Hola Skene, sé que te debo una disculpa porque casi nunca hago esto. A veces me acuerdo de esa rola que tanto te gustaba, Alicia (Expulsada al país de las maravillas) y ahora me identifico. Siempre he sido muy unido al desapego, siempre he sido así; afortunadamente la nostalgia no me ha dejado, se adhiere a lo mucho que te extraño y este escenario es tan contradictorio como yo. Por ello me gustaría romper con eso y contarte de qué va mi vida en este último año. Trataré de ser lo más concreto posible para no aburrirte.

Este 2013 había empezado de maravilla: me habían aumentado el sueldo, me había comprado un iPhone nuevo y en general la vida iba muy ligera. A finales de enero tuve una oportunidad de golpe: irme a vivir al DF. Básicamente en dos semanas arregle vivir con un par de roomies, compré una base de madera (difícil de cargar, la condenada) y un colchón usado que es suavecito. El primer día de febrero había hecho uno de mis sueños realidad: vivir el el DF. El depa está en la Colonia del Valle, muy cerca del metro División del Norte y Zapata. Fui muy feliz al llegar ahí, esa etapa a grandes rasgos fue maravillosa.

Me acordé cuando me contaste de tu experiencia de vivir con roomies y eso me pasó a mí. A pesar de que eran dos mujeres, la verdad son muy desordenadas y también eso a mí me resultó molesto. Hubo circunstancias como el respeto de los espacios, la diferencia marcada de horarios de trabajo (ella trabajaban de madrugada cuando yo necesitaba dormir) y cuestiones de higiene que no me hicieron mi estancia tan agradable. Por lo demás fue libertad pura: una hora de dormir más, disfrutar de una cerveza a final de un día cansado, no tener problemas para regresarte tarde en donde siempre un taxi me llevaba a casa sin gastar una fortuna y una vida sexual que se volvió activa.

A 15 días después de que me mudé volví a ver a la chava que me gusta. No fue una experiencia agradable y ahora me odia. Eso sí me tiene un poco chipil pero bueno, la vida sigue. Eso paulatinamente fue el principio del fin de la casa de cartas que era mi felicidad. En abril pensaba mudarme pero el destino se me adelantó: me corrieron de la chamba donde estaba después de dos años y nada más tenía mi liquidación. Se acercaba mi cumpleaños y debía tomar decisiones. Pagué una parte de mi deuda y la renta hasta junio y lo otro era gasto. Así pasaron los partidos en los que el Cruz Azul llegó hasta la final (el estadio me quedaba a 10 minutos de casa) y mi cumpleaños. Fue difícil dejar la Del Valle, aún la extraño.

Justo cuando se me acabó la lana de la liquidación consigo trabajo. La única bronca es que ahí trabajaba sábados y domingos y sólo tenía un día de descanso. Dos meses después el proyecto en el que estaba decía tener una "crisis" que podría dejarnos desempleados en octubre y para mi fue el pretexto perfecto para dejarlos. En un principio no pensé que fuera una mala decisión pero ya van dos meses y medio y no consigo trabajo, poco a poco me he ido quedando sin dinero y aún tengo deudas qué pagar, jejejeje. Ahorita mis papás me ayudan en lo que me recupero, hay días en los que pierdo la fe y me saco de onda, pero se me pasa.

En ese tipo de ocasiones te he necesitado más que nunca. Recuerdo esos días en lo que no necesitábamos nada más que nuestra compañía para darnos aunque sea un pequeño ratito de felicidad. El mundo podía irse al diablo mientras pudiéramos ir al cine, por un café, al museo o a echar la chela. Y siempre había música donde íbamos, siempre una nueva cosa por aprender. Sé que la nostalgia es un juego peligroso pero no hace mal, de vez en cuando, darle una checada. De hecho, me gustó la idea de un día contactarnos vía Skype y, por qué no, tratar de hacerlo seguido. A veces recuerdo lo que le dijiste a mí mama, que era un voluble y es cierto; aunque en verdad me encantaría estar en contacto tanto como sea posible.

Ha pasado mucho tiempo y entenderé si ya no es tan importante saber de mí y si si sientes que he fallado en nuestra amistad. En verdad lo siento, el desapego no me ha dejado cosas buenas y es algo que quisiera cambiar. Creo que 7 horas de diferencia y el mar no deberían presentar algún problema. Fija un día y hora en la que estés disponible y ahí estaré sin importar cuán temprano o tarde sea. =)

Te mando un fuerte abrazo y deseo que estés bien, amiga.

Te quiero mucho y te extraño aún más.

Gerson.

1 comentario:

La Pitonisa dijo...

Hola Gerson.
Perdona que ande de metiche por aqui...pero Ahorita que lei que andas desempleado me acorde que eras community mánager o algo asi, no?
Llevo las contrataciones de una agencia de publicidad (no los recluto).Pero puedo mandar tu CV si quieres.Ahi seguido contratan.
Saludos.